Era un día como cualquier otro. 

 

Era un día como cualquier otro. Todo transcurría en normalidad y calma. El viejo y su hijo estaban sentados en el corredor de la casa, contemplando como el ganado lenta y cuidadosamente se movía a través del terreno, agarrando toda hojita de yerba que encontraban en su camino, para luego convertirla en abono que caía ruidosa y olorosamente al suelo y que luego serviría de abono y semilla para la nueva yerba que ellas consumirían y volverían a convertir en abono.

 

-    Es él circulo de la vida!, Dijo el viejo en voz alta.

El muchacho volvió la cabeza hacia él y le dijo –ah? Dijiste algo?

-    Nada mijo, solo pensando en voz alta.

    

Volvió a reinar el silencio interrumpido ocasionalmente por el ruido de las vacas alegremente dejando abonado el terreno y la mosca que ocasionalmente se atrevía a acercarse a ellos después de haber degustado el abono del ganado.

 

-    Recuerdo los campos de mi tierra, mi linda Colombia, donde el sol es más brillante, las nubes todas tienen un borde de plata alrededor y juegan a través del cielo azul en un continuo perseguirse y no alcanzarse.

-    No empieces otra vez papá, eso fue hace muchos anos, quien se acuerda!

-    Yo me recuerdo hijo, y sí, hace muchos años, pero todos los días viene a mi memoria el azul del cielo, el limpio aire, el olor a leña quemada cuando los campesinos preparaban sus desayunos. Recuerdo la llenura de mi corazón al contemplar cada día como si todo fuera nuevo, el verdor de los campos, el olor a tierra mojada.

-    Si, lo sé, por eso te oigo repetir todas las mañanas lo mismo: huele a Colombia. Si amabas tanto tu tierra, por que saliste?

-    Las circunstancias hijo, allá no encontraba trabajo y vine buscando un futuro mejor.

-    Ja! Que mejor futuro!

-    Por que lo dices así?

-    No te das cuenta Papa de lo que tu has sufrido, de lo duro que has trabajado, quemando tu alma y tu cuerpo, torciendo tus huesos y ennegreciendo tus pulmones en una factoría? Crees que valió la pena toda la soledad, todas las enfermedades que has sufrido sin tener quien te traiga una aspirina, el dolor de tu alma al recordar a tu familia y no tener quien te de un abrazo cuando estas triste?

-    No lo se hijo, no lo se! Ya la soledad echó raíces en mi alma.

          

El viejo se metió de lleno en sus recuerdos, recordaba el día que se despidió de su madre, a la que nunca mas volvió a ver, de sus hermanos, de su linda Colombia con sus casitas encaramada en las montañas desafiando la gravedad y a las autoridades para gritar orgullosas que también tenían derecho a respirar el aire que todos respiramos. Pensó como le hubiera gustado quedarse y como a menudo se decía a sí mismo que si pudiera volver al pasado, cambiaria todo y no saldría nunca de su tierra.

Corro por campos abiertos

 

Corro por campos abiertos, veo luz a la distancia y mientras mas corro hacia ella mas esta se aleja. El olor a rosas y pinos silvestres inunda el aire. Estoy corriendo y al mirar mis pies, estos están quietos, todo mi cuerpo flota. Miro mis brazos y los veo cubiertos por una línea de energía azul; siento un gozo tremendo; escucho música celestial que no se de donde viene, toco mi cuerpo y lo siento solido. No entiendo!

Abro los ojos pero ya están abiertos, respiro pero mi cuerpo esta quieto, mis pulmones no necesitan el aire, quiero gritar y no tengo voz.

Confusión, alegría, terror, esperanza... quien soy? Donde estoy? Que hago aquí, porque no hay nadie?

Todo se ve brillante pero al mismo tiempo parece la luz mortecina del crepúsculo, los arboles se agitan y no hay viento.

En una momentánea angustia me parece escuchar que alguien llama un nombre:

Gildardo!…. Quien es Gildardo, acaso soy yo; escucho mas atentamente y oigo gritos desgarradores de alguien quemado por la ausencia, al prestar atención, deseo saber que esta pasando, inmediatamente me veo transportado a una sala donde hay un ataúd y mucha gente alrededor, veo una mujer llorando…no siento ninguna conexión; veo muchas flores... un olor a muerte que me hace desear alejarme de ahí, pero algo me ata a la escena.

Quiero saber donde estoy e inmediatamente me veo al frente del edificio y veo un letrero que dice: Funeraria Histórica, siento confusión e indiferencia.

Me parece recordar un siglo atado a una silla de ruedas… no,.. no era yo, yo vuelo y estoy sano y feliz.

La curiosidad me hace volver a pensar en el interior del edificio e inmediatamente me veo adentro al frente del ataúd, Deseo levantar la tapa para mirar el interior…mi mano pasa a través del ataúd, es inmaterial…yo rio feliz y no entiendo la angustia de la gente congregada en ese lugar.

Se me ocurre una idea, pienso en ver quien esta adentro del cajón e inmediatamente me veo frente a un cuerpo viejo y maltratado, desgastado por los anos y los sufrimientos.

No quiero estar más ahí, me siento joven, inmaterial, liberado… floto feliz hacia el lugar donde recuerdo haber visto la luz, y haber sentido el olor a flores.

Siento que hay una eternidad al frente de mi para volver a pensar en la silla de ruedas, el ataúd, el viejo enfermo y maltratado que esta adentro de el y la mujer que llora desconsolada.


Jugar el juego de la oscuridad 

 

Jugar el juego de la oscuridad…no me gusta, no me gusta la oscuridad, los

terrores regresan, los miedos de estar sola para siempre, el miedo de no ser

amada, el miedo de no escuchar una voz que me necesite, el miedo de nunca

mas tener a nadie que me necesite.

 

Respiro hondo y calmo los latidos de mi corazon, luego viene el silencio… silencio largo donde solo escucho mi respiración y el latido de mi

corazón que ahora late mas lentamente.

 

Siento energía de amor que me envuelve, recuerdo…o quiero recordar, el

silencio cuando flotaba en el vientre de mi madre…quiero tratar de recordar

todas las esperanzas que traía para mi nueva vida… como estoy en la

oscuridad, solo escucho los latidos del corazón de mi madre: pum pum..pum

pum… es ese el corazón de mi madre? O acaso será el mío?

 

Me siento flotar en un liquido tibio y confortante, me siento segura, me

siento lista para la vida, me siento lista para cuando salga de esta oscuridad,

volver a disfrutar el color de los arboles, el ver como están orgullosos de

estar ahi y siento su energía que me reconforta, me siento lista para volver a

disfrutar el cielo azul, con sus nubes que se persiguen y nunca se alcanzan,

de sus nubes que flotan felices, a veces nos dan sombra, a veces nos dan

lluvia, quiero volver a sentir el sol en mi piel, que me calienta, me da vida,

le da vida a las plantas…estoy lista para sentir el amor que la vida me

demuestra con cada inhalación y exhalación de aire que llena mis pulmones

y le da vida a mi sangre.

 

Ver los colores de la vida, escuchar sonidos…escuchar música que levanta

mi alma a lugares infinitos y eternos…escuchar cuando el viento juega con

las hojas de los arboles, invitándome a desear ser pájaro y extender mis alas

y volar a refugiarme entre sus hojas, a esconderme de la lucha cotidiana

por la existencia y quedarme entre sus hojas, hacer mi nido, vivir mi vida,

encontrar ahí mi sustento y no tener que volver a salir a correr de un lugar

para otro, de escapar de esta angustia existencial que parece marcar mi vida

cotidiana.

 

Solo con mis ojos cerrados te recuerdo

 

Solo con mis ojos cerrados te recuerdo,

Recuerdo la tibieza de tu piel,

el sonido de tu respiración entrecortada,

El olor a ti

El deseo latiendo entre los dos

Amor gigante transformado en nada.

 

Ya no te encuentro ni en mis sueños

Se fue a la nada ese amor robado

Se transformo en dolor y en tedio

Solo te encuentro en el oscuro

Y mis dias de luz estan vacios.

 

Eres errante vagabundo

Que irrumpió en mi vida sin permiso,

Locura de pasión por unas noches

Sufrimiento, remordimiento y placer

Corazón estrujado, piel arañada

,

Dolor, placer… sentimiento de culpa

Cuerpo frio

Te fuiste de mi vida

Lo mismo que llegaste

Sin pedirme permiso

Y sin amarme


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